jueves, 11 de julio de 2013

NO SE SABEN EL REGLAMENTO

Se consensúa un reglamento hace unos cuantos inviernos ya, y ni los propios implicados se lo saben. Pues apañados estamos. Se escribieron las normas que siempre habían tenido los concursos, pero que nunca se habían plasmado. Lo aprobaron una gran mayoría y lo acataron todos los participantes. Con ese hay que regir los concursos, publicado en esta web está: 


Los reglamentos requieren de actualizaciones, porque siempre aparecen nuevas situaciones que hay que ir acotando para no dejar nada fuera de lo "legal". 

El de las anillas ahí se quedó como se redactó ese invierno. Y está bien, se podría pulir y añadirle lo específico al nuevo formato de eliminación, pero es perfectamente válido. ¿Entonces por qué no se cumple todo lo que pone? ¿En qué no se cumple? Vamos a ello.

4 - Desarrollo 
Cada pareja participante actuará durante 3 minutos. El tiempo empezará a correr entre 15 y 20 segundos después de saltar la vaca a la arena. Una vez comience el tiempo, el cronómetro sólo se detendrá en los casos indicados en el punto 5.
6 – Validez de las anillas 
Las anillas serán válidas durante los 3 minutos que dura la actuación de la pareja. No siendo válidas las introducidas antes de comenzar el tiempo, o las que se metan concluidos los 3 minutos. Tan sólo se exceptuarán las anillas conseguidas tras una acción que comience dentro del tiempo. Es decir, se dejará finalizar las acciones iniciadas dentro del tiempo de los 3 minutos.

Es decir, el tiempo, según el reglamento, tendrá que comenzar cuando la vaca lleve entre 15 y 20 segundos. Y si se le meten anillas antes de ese tiempo, no valen. Entonces, ¿por qué se da el tiempo de salida a una pareja si se pone a portagayola? Según el reglamento, no se puede. O se cambia el reglamento, que eso no se debe hacer en mitad de una temporada, o se aplica el que hay. Aplicándolo, pues la pareja que quiera se puede poner a portagayola si lo desea, que tiene un gran mérito y se alaba, porque una cosa no quita la otra, pero el tiempo no se les dará hasta entre 15 y 20 segundos después de salir al vaca. Y si meten anillas en ese tiempo, no valen. Choca porque un miembro de la pareja que está comenzando así sus lidias, firmó el reglamento. Es que además si no, pasan cosas raras como que, en Alagón y Teruel, se ponen a portagayola, sale rana la tentativa y como no se recorta, no comienza el tiempo. Pues no tiene sentido, la verdad.

5 - Paradas de tiempo
Se detendrá en los siguientes casos:
- Cuando haya un momento de riesgo patente en el que salgan al quite varios compañeros.

¿Se para siempre el tiempo cuando se sale al quite? ¿Se aprovechan algunas parejas de ese momento de apuro para entrar a la vaca que está pendiente de otros en ese momento?

10 - Desempates
Si al final de un concurso existiera empate en el primer puesto entre dos o tres parejas, habrá de realizarse un desempate.

Este punto número 10 debe incluir un asterisco. En la nota pondrá, todo esto será así salvo en Pamplona, que no se va a hacer aunque de tiempo antes de la una, que es la hora límite para la conclusión del festejo. Se denominará norma PSHLQLPPLC (Pamplona Siempre Hace Lo Que Le Pasa Por Los...)

Además de estos tres puntos, hay otro tema que lastra los concursos. Las paradas de tiempo por lesión. El esguince de pulmón está a la orden del día. Si no se está preparado físicamente, mala suerte. El que esté fuerte tiene que ser beneficiado. Hay maneras de atajarlo. Por ejemplo conceder un parón de medio minuto por lesión a cada miembro de la pareja en la actuación. Una vez consumido... Pues se siente si hay un golpe. Si se quiere atajar, se ataja. Si medio minuto es escaso, se puede subir a un minuto. Anda... si es lo que ya recoge el reglamento... Si es que nadie se ha preocupado de aprendérselo. La vuelta tras la lesión ya roza el cachondeo cuando no cuenta el tiempo hasta que no pisa la arena el lesionado. ¿Cómo? De eso nada, el tiempo a contar desde el momento que se recupere y ha de volver por el mismo punto donde estaba. Es que si no, se da vuelta por el callejón hasta tener la situación favorable. Vamos que sale rentable "lesionarse". Que no, que eso es hacer trampa y da muy mala imagen.

Y ahora el tema de desempates. Entre tres hay que hacerlo siempre. Bien, vale. ¿Y entre más? Seguimos en las mismas mirando a las avutardas. Es que como no se va a volver a dar un cuádruple o quíntuple empate... No no, en Teruel, el canto de un duro le faltó. Ni abriendo los ojos el formato de eliminación han sabido poner una norma. En caso de empates entre cuatro parejas o más, que gane la pareja que antes en tiempo haya metido su primera anilla. 

A ver si por lo menos, a raíz de este escrito, a alguno le da por, como poco, leerse el reglamento. Algo habremos ganado. Y ya solo les faltará ponerse serios para que la megafonía de un concurso no la pueda hacer cualquier persona, si no quien esté preparado sabiendo lo que se hace, así como dando una buena imagen hablando. Es que es prácticamente el árbitro de un concurso, como para que pueda hacerlo quien no está cualificado.

E inciso que no tiene que ver con esto. Gran alegría que una vaca con 15 años (las vacas buenas son las que siguen funcionando cuando son viejas), que siempre ha encantado a quien escribe por lo lista y enrazada que es, haya tenido el homenaje de pisar la arena de Pamplona y además lograr el premio de mejor vaca. Enhorabuena a los Hermanos Ganuza, actuales propietarios, a Juan José Laparte como criador y cómo no a una señora vaca: "Bailarina". 

Gran vaca la Nº 137 "Bailarina"

lunes, 8 de julio de 2013

RECONCILIACIÓN CON LAS ANILLAS

Con la de disgustos que nos están dando las anillas en los últimos tiempos, lo de Teruel es una reconciliación. Por fin llegó la demostración de que lo que se dice desde estas líneas en reiteradas ocasiones, es posible y además es el camino a seguir para luchar por las anillas. Ya tocaba una alegría después de un arranque de temporada enrarecido y en el que se iba de decepción en decepción.

De primeras, el sorpresón fue que hubo mucho público. Más que para el recorte libre del Domingo. Cierto es que la fecha era muy buena, pero la respuesta fue una alegría mayúscula. Que vaya tanta gente es bueno para todos, ganaderos, recortadores, aficionados y por supuesto empresarios.

Teruel, tierra con aficionados entendidos, capital de provincia y plaza de primera para festejos populares, tuvo un Concurso de Recortadores como merece. Uno de verdad, con vacas fuertes. Y no lo tuvo de rebote,  porque era lo pretendido desde el momento en el que se anunció en el cartel la ganadería y las diez vacas actuantes. Más claro, agua. Tauroemoción programó algo bueno de verdad.

Cartel del concurso
Si al mal momento de los recortadores, se le añadía que había hasta cuatro ausencias por diversas lesiones, tres de ellas muy importantes, la cosa no pintaba halagüeña. Pero se alinearon los planetas y tras el desencajonamiento previo, se vivió un concursazo en la capital turolense. Qué raza sacaron la gran mayoría de los de pantalón blanco. Con eso, al fin del mundo.

Lote fortísimo de Ozcoz. Alabándole que fue un lote de los más parejos que se recuerdan, porque no se escapó ningún bombón. Sigue siendo quien más fuerte puede presentar un lote de diez o doce. Y eso que hay menor nivel que hace unos años y que esta temporada tampoco parece que aún estén a su máximo nivel las reses. La excusa de la riada en la finca principal y del larguísimo viaje a Portugal de algunas de ellas, es válida ahora. Más adelante ya no valdrá. Con eso y todo, puede seguir diciendo, no tengo trono ni reina...

Según avanzaba el concurso se sucedían las buenas actuaciones de las parejas. Abriendo plaza "Pericolo" y "Copica" tuvieron su mejor actuación de la temporada. Se dejó la vaca, lo que no habla bien de ella. A Patxi y Roberto no les gusta por ningún lado la Nº 122, qué le vamos a hacer. "Glandu" (que sustituía a Jaume Orenga) y José Manuel, lo dieron todo, aunque tuvieron más decisión antes de que en una cruzada la vaca les tapara la salida. Los campeones de España pasaron inéditos por Teruel, se abrieron en los recortes y hasta se llegaron a ir en dirección contraria. Mario con la Nº 813 lo ve claro, Héctor no. Ozcoz tampoco lo ve claro con la vaca para las anillas. O se centra, o no será para esto. Albert e Iván le dieron mucho en tandas de dos a la vaca que siempre va a los medios y que ellos no le dejaron irse. Decisión y ganas. La Nº 89 volvió por sus fueros. Con tres recortes a una plaza se le ponen los pelos de punta. Sin anillas. Con una vaca sensacional y un recortador como "Chusky" que se los pegó extraordinarios. Cuairán (que no iba a salir, pero reemplazó a Manolo) y Rodrigo dejaron ir demasiado tiempo en colocaciones. La espera mereció la pena para ver la anilla del concurso. Grande Cuairán, pedazo de anilla. Gabi y Alejandro, estuvieron para quitarse el sombrero. El segundo atropelló la razón y se dejó coger, y la mala fortuna de un pistón lo dejó sin sentido. El primero estuvo perfecto recortando a una vaca difícil y hasta se paró en la cara. Y cerraron Héctor y Jesús, que entraron por la vía de la sustitución y que aunque recortaron a la vaca donde ella quiso, acertaron dos anillas y se llevaron el concurso para casa. Alegría por ellos, para que les haga coger más ilusión y progresar. Una a una, estas fueron las diez parejas. Y el inciso de que Imanol Sánchez como director de lidia, corroboró que es el mejor del momento con el capote a la hora de hacer los quites.

Y ahora las reflexiones. Si Jaume y José Manuel (aunque no salieran juntos en Teruel), Albert e Iván, Gabi y Alejandro y Héctor y Jesús, estuvieron así de bien en Teruel, sobre todo por ganas y arrojo para tirarle a las vacas, ¿se va a ser justo con ellos? Es que estos sí que merecen oportunidades porque sí que son nuevos ¿Se les va a llamar para citas posteriores? En la plaza se lo han ganado, ya no son opiniones, son hechos. Y el que quiera ese apoyo, que haga lo que hicieron esas parejas en Teruel con vacas tan fuertes. Son cuatro parejas que merecen estar en los concursos importantes, y si les sumamos a los que ya lo tienen ganado por nivel y trayectoria, como son Manolo y Cuairán, Mariano y Diago, Patxi y Roberto, Asier y Morella, "Pericolo" y "Copica", Héctor y Mario, "Chusky" y Sedeño, Y  los que se merecen contar con ellos como Mikel y Rodrigo y Adrián y Carlos... Ya tenemos muchas parejas. ¿Qué quiere decir esto? A sacar conclusiones. Si queda alguna duda, mírese la clasificación.

Concursazo en Teruel. Con todas las letras para cualquiera que entienda esto como ha sido toda la vida. Anillas igual a emoción y la emoción la da el riesgo. Riesgo que viene con las vacas fuertes. Muchos aficionados habituales de los Concursos de Recortadores, de los que llevan más de una, más de dos, más de tres y más de cuatro temporadas amando a las anillas, sumergidos entre turolenses en los tendidos, cantan lo que se disfrutó con el concurso. Cómo se valoró cada anilla y el mérito que se les dio. Se reconoció el altísimo nivel de ganado. Se vivió con tensión y con emoción. Las anillas se aplaudían con pasión, porque eran algo de mérito. Cuando se meten cincuenta y cuatro anillas en un concurso que las vacas permitían más de cien, los aplausos son apáticos. Y quien entiende, se aburre cual ostra. Esa es la diferencia. No olvidar que en todo festejo taurino el protagonista principal es el animal de lidia. Todo lo demás, secundario. Necesarios muchos, pero nunca a la altura de la vaca o el toro.

Las anillas en plazas importantes son esto. Quien piense que son otra cosa, si lleva pantalón blanco, que busque otras alternativas y si es aficionado, que busque otros festejos, porque aquí se equivoca. El que no pueda con este compromiso, que pulse el botón de parada y se apee en la siguiente.

Enhorabuena a Tauroemoción porque apostó por las anillas y salió bien, se agradece. Las anillas necesitan concursos así como el comer. Gracias de verdad a los recortadores por dar esta enorme alegría. 

viernes, 5 de julio de 2013

UNA EXPERIENCIA INOLVIDABLE

Praça de Touros Palha Blanco
Pasarán los años y los que ahí estuvimos seguiremos recordando un viaje que ha sido especial. Por todo, por la experiencia vivida, por las emociones en la arena y por las sensaciones que quedan después de exportar la tradición taurina del festejo popular de la ribera por excelencia. 
Tres días de compartir vivencias y de ir a la aventura. De muchos kilómetros de carretera y de horas y horas de convivencia. 
Fuerte apuesta por parte de Toropasión. Con la empresa, compromiso de los participantes, porque el reto no era nada sencillo. Vacas exigentes y toros imponentes. Con verdad y con categoría es como se potencia algo. Con alivios y medias tintas, no. Si se va, se va con la verdad por delante. Las anillas son emoción y la emoción la dan las reses fuertes.

Preciosa la plaza
Metidos en faena, se llegó a la noche del 28 de Junio, a las diez y media, hora portuguesa. Una preciosidad la plaza de Palha Blanco de Vila Franca de Xira. Un marco  que se adaptaba a la perfección a las anillas. Aunque apareció un hándicap, los burladeros interiores eran más bajos que la barrera, por lo que no los verían al saltar y los golpes contra ellos podían ser fuertes.
Poca gente en los tendidos, no hay que mentir. Si no funcionó en taquilla, pues no funcionó. Se había hecho todo bien y la respuesta era una incógnita. Salió cruz. Malo para todos. Pero bueno, el compromiso con los que habían pagado su entrada iba a ser el máximo. Si se había ido a enseñar las anillas, que fuera en su máxima expresión.
Cuatro parejas, ocho recortadores. Lo iban a dar todo, aunque no se jugaran un premio. Demostración de raza, de orgullo y de querer que las anillas tiren para delante. Con esfuerzos y sacrificios es como se levanta esto.
Mario en la cara del de Palha

Cada pareja lidió el lote que más se podía adaptar a sus características, a fin de poder lucirse todos. Pero sin que dejara de haber compromiso. Se buscó el espectáculo de lucir a los animales, las vacas y los toros. Y es que en la arena estaban los dos número uno, el de toros para recortes y el de vacas para anillas.
Entró muy pronto el público en el festejo. Gustaron mucho las acciones que se realizaban ante las reses, se cantaba el ¡uy! cuando la anilla estaba cerca de entrar y se celebraban con alborozo los aros introducidos. Se aplaudió a rabiar la consecución de las anillas, pero además también se vibró con los remates en tablas y la emoción del hilo de las reses.


"Sardina" rematando

Las vacas hicieron lo que tenían que hacer. Aportar emoción. Las cuatro remataron en tablas y eso es lo que hace importante meter anillas. Si no hay peligro, todo queda descafeinado. En Vila Franca hubo peligro y los recortadores se la jugaron de verdad. Se entregaron y fueron a ganar todos. Y así empezaron a llegar las actuaciones espectaculares.
"Foro" y "Glandu" rayaron a gran nivel ante "Aspirante II" al que le metieron 5 anillas. De cara y andándole para acabar parándose en la cara y metiéndole las anillas hasta la cepa. Jaume Orenga y José Manuel González le metieron cuatro a su vaca y estuvieron bien con el toro. Esta pareja se está haciendo un hueco en el circuito por méritos propios. Tienen ganas y además valen para esto. Cinco anillas cada pareja que les iba a hacer ganar el festejo, acompañados de otra pareja más.

Anilla de "Foro"

Jaume y José Manuel con el berrendo en jabonero
Héctor Colás y Mario "Gonçalves" pecharon con el Palha de peor cornamenta para las anillas, pero le entendió bien el recorte el turiasonense y poniendo la palma de lado estuvo a punto de conseguir alguna anilla. Lo mejor quedaba con "Sardina". Sí, a una exhibición con una vaca que se tira en tablas. Así, así. La raza de Mario es increíble. Se tiró a por ella con todo y le dio recortes de un mérito increíble. Caídas al callejón fuertes y vuelta a la plaza sin mirarse. Y hasta que al final, se dio un fuerte golpe en la mano en una caída que le llevó a la enfermería. Pedazo de anilla que le metió y la plaza volcada. 
Rodrigo en la cara del mejor toro de la noche
Cerraban el concurso Manolo Pérez y Rodrigo Puértolas, siendo la mejor pareja de la noche. Cómo estuvieron con "Lareiro" y cómo estuvo el de Palha con ellos. Qué gusto volver a ver a un toro que nunca se olvidará. Le dieron de lo lindo y el toro a todo. Al final de uno en uno, cada vez se cruzaba más. Qué casta. Pedazo de anilla de Manolo para el recuerdo. 


"Lareiro" con la anilla de Manolo puesta
Anilla colosal de Manolo
El broche de la noche iba a ser la actuación de esta pareja ante "Fugitiva". Que sí, que sí, para una exhibición una de las más fuertes del panorama. Los esfuerzos que están pidiendo las anillas para enganchar a gente que se fue aburrida. Épica, colosal y con emoción de poner los pelos de punta la actuación. A flor de piel los nervios. Ellos jugándosela y la vaca respondiendo. Arriba con ellos y todo apurado. Cuatro anillas como cuatro soles. Y entonces llegó el turno de que Portugal conociera los cojones de Manolo Pérez. Se los presentó a todo el respetable.
En un inoportuno resbalón queriendo colocar a la vaca, lo vio y le pegó una paliza de campeonato. Pitonazos muy feos y golpes hasta en el carnet de identidad. Cómo fue la cogida que Félix Ozcoz y Germán Villar se tiraron a la cabeza de la vaca. Para quitarse el sombrero con ambos. Y Manolo pasó al callejón aturdido y noqueado. Pero cuando iba siendo trasladado, sus atributos masculinos dijeron que quería volver al ruedo. Qué gordos los tiene. Y eso que no podía ni con su alma. Ni para tenerse en pie le daba. Y cayó a la arena otra vez. Hubo que retirarlo a la fuerza. La plaza en pie con él. Grandioso lo vivido. Eso es lo que hace grande a un recortador, ser superior al resto de los mortales.
Así se ponía fin a las anillas, en una noche para el recuerdo. El público se volcó con las anillas, y parece que todos los que fueron, repetirían. Ojalá se pueda repetir. Será difícil porque esta apuesta de Toropasión no ha dado beneficios precisamente. Cuando se hacen las cosas bien, son caras. Ha sido una aventura, que desde el punto de vista del aficionado ha sido preciosa y que se agradece enormemente por el intento de apostar por las anillas.
Quedaba, antes de emprender el viaje de vuelta, ir al hospital. Ahí estaban Mario y Jaume, haciéndose pruebas. Lo del primero quedó en fuerte golpe y lo del segundo en fractura de una costilla. El palizón de Manolo, alguna secuela ha dejado también. Esto los hace más grandes aún. Los que quieren que esto vuelva al sitio que nunca debió perder, dan la cara así. 


La expedición zaragozano-riojana, a falta de Mario que se encontraba en el hospital
Siempre será recordado este viaje por ser la primera vez que las anillas se exportaban a Portugal. Se enseñaron con vacas fuertes y toros de gran categoría. Orgullosos pueden estar los ocho recortadores, los dos ganaderos y la empresa Toropasión de haber hecho historia para las anillas.